No descubrimos nada si decimos que uno de los pilares fundamentales de la agricultura es un suelo fértil. Sin este, sería imposible cultivar los alimentos que llenan nuestras mesas. Por eso es tan alarmante el creciente deterioro de nuestro suelo, en gran parte culpa del propio ser humano, con técnicas tan agresivas como el sobrepastoreo, la agricultura intensiva y la deforestación. Si a esto le sumamos la desertificación cada vez más pronunciada por culpa de la sequía y el cambio climático, nos encontramos ante una situación más que grave. Para evitar esto, cada vez está más extendida una idea de agricultura alternativa a la intensiva, llamada agricultura regenerativa. ¿Sabes en qué consiste este tipo de agricultura y qué beneficios ambientales tiene?